¿CÓMO EL EJÉRCITO MEXICANO LE PUEDE GANAR LA GUERRA AL NARCOTRÁFICO?
Por Ernesto Partida Pedroza
Hay un manual que casi todos los ejércitos del mundo han usado para ganar las guerras, este manual fue el arma secreta para que Napoleon conquistara la mayor parte de Europa y fue derrotado cuando dejo de usarlo.
Ho Chi Ming logro sacar a los franceses y a los Norteamericanos de Vietnam usando las estrategias de este manual. Si los norteamericanos hubieran usado este manual, no hubieran perdido la guerra en contra de Vietnam, de Corea y de Bahía de cochinos.
Por supuesto que me estoy refiriendo al Arte de la guerra de Sun Tzu, un guerrero legendario que vivió hace 2500 años y que hasta la fecha sigue vigente.
Hay muchos indicios de que el ejército mexicano ha estudiado el Arte de la guerra, pero en el terreno de los hechos nos demuestra que el ejército no ha entendido las estrategias que el autor del manual recomienda.
En lo que va del sexenio, hay más de 50 mil muertos, más de 10 mil desaparecidos, 125 mil desplazados, 40 personas han solicitado asilo político en Canadá, miles de negocios han quebrado, muchas inversiones se han dejado de realizar, etc.
El autor nos dice: “Por esto, los que ganan todas las batallas no son realmente profesionales; los que consiguen que se rindan impotentes los ejércitos ajenos sin luchar son los mejores maestros del arte de la guerra”.
“Por lo tanto, un verdadero maestro de las artes marciales vence a otras fuerzas enemigas sin batalla, conquista otras ciudades sin asediarlas y destruye a otras naciones sin emplear mucho tiempo”.
El presidente Calderón y su grupo de asesores, seguramente no conoció la magnitud del problema del narcotráfico y aun así le declaro la guerra al narcotráfico.
La mejor forma de atacar a un ejército enemigo es satisfaciendo las necesidades de las poblaciones que supuestamente ese ejército enemigo satisface.
Es necesario reconocer que los narcos satisfacen necesidades en forma pervertida, dan “empleo” y dinero a manos llenas, ¿Quién se resiste a esto?
Si el ejército mexicano solo defiende con armas al pueblo, y sin satisfacer las verdaderas necesidades, lleva las de perder.
Las poblaciones con hambre no se interesan por ideologías o partidos políticos, lo que realmente les importa obtener son los satisfactores económicos.
Si los narcos les llevan algo de esos satisfactores, a esos se les hace caso.
El plan DNIII a las zonas del narcotráfico
El DNIII es un ejército de paz que lleva a las poblaciones suministros y tranquilidad cuando sufren las catástrofes provocadas por la naturaleza.
Este plan ha sido muy exitoso y bien recibido por la población.
El problema del narcotráfico también es una catástrofe, pero provocada por los seres humanos.
El doctor René Torres Bejarano, experto en ingeniería en sistemas y catedrático del Instituto Politécnico Nacional, se pregunta ¿Porque no llevar el plan DNII a las zonas de narcotráfico?.
Según nos cuenta esta catedrático, fue invitado al ejercito a dar un taller para diseñar una estrategia para la fabricación de armas para combatir a los narcos, el curso se los dio, pero al final les explico que esas armas no sirven para lo que pretendían, les explico que en lugar de combatir a los narcos, deberían cautivar a las poblaciones con acciones que normalmente hacen en las zonas de desastre, o sea, llevar el plan DNIII a esas zonas.
Por supuesto que las zonas del narco se han convertido en zonas de desastre, hay una gran cantidad de muertos, como en ninguna otra catástrofe.
La mejor vacuna contra el narcotráfico es mediante la satisfacción de las necesidades básicas de los pueblos.
Si el ejército penetra en los pueblos, si detecta sus necesidades y los ayuda, no existe mejor acción que el gobierno y el ejército podrían hacer.
Habrá seguramente pueblos que carezcan de agua, pues el ejército tiene fabricas de armas, estas podrían reconvertirse y en lugar de hacer armas, podrían fabricar bombas de agua o molinos que realmente se requieren en las pequeñas poblaciones, ¿Qué narco podría penetrar en esos pueblos?
Imaginemos a los soldados ayudando a la población en sus necesidades más elementales, tales como se muestran en las imágenes que a continuación aparecen en seguida.
• Servicio médico y odontológico.
• Aplicación de vacunas.
• Reparación de aparatos electrodomésticos.
• Reparación de aparatos electrónicos.
• Cortes de pelo.
• Servicios de mantenimiento a planteles educativos.
• Trabajos de albañilería.
• Trabajos de plomería.
• Trabajos de herrería.
Para el desarrollo de estas actividades, la Secretaría de la Defensa Nacional cuenta con personal especialista, el cual se traslada a las áreas determinadas, y una vez en ellas, se despliega estableciendo:
Consultorios médico y odontológico.
Talleres de reparación de aparatos electrodomésticos.
Talleres de reparación de aparatos electrónicos.
Peluquerías.
Células de trabajos de mantenimiento.
l servicio es totalmente gratuito y no se requiere de ningún trámite o documento para recibir la atención requerida por la población.
En los planteles educativos que lo requieren, se proporciona servicio de pintura, herrería, carpintería, plomería, chaponeo y limpieza y arreglo de juegos, con el fin de proporcionar a la población infantil, mayor seguridad, higiene y comodidad durante su estancia en dichas instalaciones.
Las actividades son desarrolladas por personal militar especialista, entre los que se encuentran, médicos, enfermeros, plomeros, albañiles, carpinteros y herreros.
Esta podría ser la aplicación de aquel consejo del guerrero chino de que se pueden ganar batallas sin haber disparado un arma.
Se podrá decir que las situaciones de desastres naturales son muy diferentes a las zonas de narcotráfico.
Por supuesto que hay grandes diferencias, pero en las dos zonas hay gente necesitada de ayuda y creo que no la podrían rechazar.
Otra gran diferencia es que no se actuaria igual, el ejercito tendría que contratar a otro tipo de especialistas que ayuden a encontrar la vocación de los pueblos y trabajar conforme a lo que se encuentre.
Irían especialistas que puedan detectar los recursos de cada zona para aprovecharlas y crear con ella la riqueza de los pueblos.
Sería recomendable que también asistieran asesores educativos para preparar a los maestros de todas las escuelas para introducirlos en un esquema de calidad educativa de tal manera que los estudiantes empiecen a vislumbrar la apertura de nuevos horizontes.
¿Habría alguna razón para que los narcos vayan a estos pueblos en busca de vendedores y consumidores de drogas?
¿Qué pueblo que ha sido víctima de esta guerra podría resistir la ayuda del Plan DNIII?
¿Qué pensaran los altos jefes del ejército como los soldados rasos de esta propuesta?
¿Qué preferirán los familiares de los soldados que se vayan a matar narcos o a ayudar a gente?
En los últimos tiempos el prestigio del ejército ha sido muy cuestionado por vulnerar los derechos humanos, esta propuesta podría ser la forma de reparar esas faltas.
Un hecho anecdótico, el experto en el pensamiento sistémico, René Torres fue compañero en la Primera Asamblea de representantes del Distrito Federal de quien hoy es el presidente de México, este mismo estaría dispuesto a explicarle al presidente de que manera se puede usar el pensamiento sistémico para resolver el grave problema de inseguridad que sufre el país.
Es posible que el planteamiento de esta propuesta traiga una diversidad de reacciones, me gustaría conocerlas.
Cualquiera que sea su opinión, hágamela saber.
elsuenomexicano@yahoo.com.mx
Por Ernesto Partida Pedroza
Hay un manual que casi todos los ejércitos del mundo han usado para ganar las guerras, este manual fue el arma secreta para que Napoleon conquistara la mayor parte de Europa y fue derrotado cuando dejo de usarlo.
Ho Chi Ming logro sacar a los franceses y a los Norteamericanos de Vietnam usando las estrategias de este manual. Si los norteamericanos hubieran usado este manual, no hubieran perdido la guerra en contra de Vietnam, de Corea y de Bahía de cochinos.
Por supuesto que me estoy refiriendo al Arte de la guerra de Sun Tzu, un guerrero legendario que vivió hace 2500 años y que hasta la fecha sigue vigente.
Hay muchos indicios de que el ejército mexicano ha estudiado el Arte de la guerra, pero en el terreno de los hechos nos demuestra que el ejército no ha entendido las estrategias que el autor del manual recomienda.
En lo que va del sexenio, hay más de 50 mil muertos, más de 10 mil desaparecidos, 125 mil desplazados, 40 personas han solicitado asilo político en Canadá, miles de negocios han quebrado, muchas inversiones se han dejado de realizar, etc.
El autor nos dice: “Por esto, los que ganan todas las batallas no son realmente profesionales; los que consiguen que se rindan impotentes los ejércitos ajenos sin luchar son los mejores maestros del arte de la guerra”.
“Por lo tanto, un verdadero maestro de las artes marciales vence a otras fuerzas enemigas sin batalla, conquista otras ciudades sin asediarlas y destruye a otras naciones sin emplear mucho tiempo”.
El presidente Calderón y su grupo de asesores, seguramente no conoció la magnitud del problema del narcotráfico y aun así le declaro la guerra al narcotráfico.
La mejor forma de atacar a un ejército enemigo es satisfaciendo las necesidades de las poblaciones que supuestamente ese ejército enemigo satisface.
Es necesario reconocer que los narcos satisfacen necesidades en forma pervertida, dan “empleo” y dinero a manos llenas, ¿Quién se resiste a esto?
Si el ejército mexicano solo defiende con armas al pueblo, y sin satisfacer las verdaderas necesidades, lleva las de perder.
Las poblaciones con hambre no se interesan por ideologías o partidos políticos, lo que realmente les importa obtener son los satisfactores económicos.
Si los narcos les llevan algo de esos satisfactores, a esos se les hace caso.
El plan DNIII a las zonas del narcotráfico
El DNIII es un ejército de paz que lleva a las poblaciones suministros y tranquilidad cuando sufren las catástrofes provocadas por la naturaleza.
Este plan ha sido muy exitoso y bien recibido por la población.
El problema del narcotráfico también es una catástrofe, pero provocada por los seres humanos.
El doctor René Torres Bejarano, experto en ingeniería en sistemas y catedrático del Instituto Politécnico Nacional, se pregunta ¿Porque no llevar el plan DNII a las zonas de narcotráfico?.
Según nos cuenta esta catedrático, fue invitado al ejercito a dar un taller para diseñar una estrategia para la fabricación de armas para combatir a los narcos, el curso se los dio, pero al final les explico que esas armas no sirven para lo que pretendían, les explico que en lugar de combatir a los narcos, deberían cautivar a las poblaciones con acciones que normalmente hacen en las zonas de desastre, o sea, llevar el plan DNIII a esas zonas.
Por supuesto que las zonas del narco se han convertido en zonas de desastre, hay una gran cantidad de muertos, como en ninguna otra catástrofe.
La mejor vacuna contra el narcotráfico es mediante la satisfacción de las necesidades básicas de los pueblos.
Si el ejército penetra en los pueblos, si detecta sus necesidades y los ayuda, no existe mejor acción que el gobierno y el ejército podrían hacer.
Habrá seguramente pueblos que carezcan de agua, pues el ejército tiene fabricas de armas, estas podrían reconvertirse y en lugar de hacer armas, podrían fabricar bombas de agua o molinos que realmente se requieren en las pequeñas poblaciones, ¿Qué narco podría penetrar en esos pueblos?
Imaginemos a los soldados ayudando a la población en sus necesidades más elementales, tales como se muestran en las imágenes que a continuación aparecen en seguida.
• Servicio médico y odontológico.
• Aplicación de vacunas.
• Reparación de aparatos electrodomésticos.
• Reparación de aparatos electrónicos.
• Cortes de pelo.
• Servicios de mantenimiento a planteles educativos.
• Trabajos de albañilería.
• Trabajos de plomería.
• Trabajos de herrería.
Para el desarrollo de estas actividades, la Secretaría de la Defensa Nacional cuenta con personal especialista, el cual se traslada a las áreas determinadas, y una vez en ellas, se despliega estableciendo:
Consultorios médico y odontológico.
Talleres de reparación de aparatos electrodomésticos.
Talleres de reparación de aparatos electrónicos.
Peluquerías.
Células de trabajos de mantenimiento.
l servicio es totalmente gratuito y no se requiere de ningún trámite o documento para recibir la atención requerida por la población.
En los planteles educativos que lo requieren, se proporciona servicio de pintura, herrería, carpintería, plomería, chaponeo y limpieza y arreglo de juegos, con el fin de proporcionar a la población infantil, mayor seguridad, higiene y comodidad durante su estancia en dichas instalaciones.
Las actividades son desarrolladas por personal militar especialista, entre los que se encuentran, médicos, enfermeros, plomeros, albañiles, carpinteros y herreros.
Esta podría ser la aplicación de aquel consejo del guerrero chino de que se pueden ganar batallas sin haber disparado un arma.
Se podrá decir que las situaciones de desastres naturales son muy diferentes a las zonas de narcotráfico.
Por supuesto que hay grandes diferencias, pero en las dos zonas hay gente necesitada de ayuda y creo que no la podrían rechazar.
Otra gran diferencia es que no se actuaria igual, el ejercito tendría que contratar a otro tipo de especialistas que ayuden a encontrar la vocación de los pueblos y trabajar conforme a lo que se encuentre.
Irían especialistas que puedan detectar los recursos de cada zona para aprovecharlas y crear con ella la riqueza de los pueblos.
Sería recomendable que también asistieran asesores educativos para preparar a los maestros de todas las escuelas para introducirlos en un esquema de calidad educativa de tal manera que los estudiantes empiecen a vislumbrar la apertura de nuevos horizontes.
¿Habría alguna razón para que los narcos vayan a estos pueblos en busca de vendedores y consumidores de drogas?
¿Qué pueblo que ha sido víctima de esta guerra podría resistir la ayuda del Plan DNIII?
¿Qué pensaran los altos jefes del ejército como los soldados rasos de esta propuesta?
¿Qué preferirán los familiares de los soldados que se vayan a matar narcos o a ayudar a gente?
En los últimos tiempos el prestigio del ejército ha sido muy cuestionado por vulnerar los derechos humanos, esta propuesta podría ser la forma de reparar esas faltas.
Un hecho anecdótico, el experto en el pensamiento sistémico, René Torres fue compañero en la Primera Asamblea de representantes del Distrito Federal de quien hoy es el presidente de México, este mismo estaría dispuesto a explicarle al presidente de que manera se puede usar el pensamiento sistémico para resolver el grave problema de inseguridad que sufre el país.
Es posible que el planteamiento de esta propuesta traiga una diversidad de reacciones, me gustaría conocerlas.
Cualquiera que sea su opinión, hágamela saber.
elsuenomexicano@yahoo.com.mx
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